¿Vale la pena probar el HHC? Todo lo que debes considerar

Si estás aquí, probablemente has oído hablar sobre el HHC (hexahidrocannabinol) y tienes curiosidad por saber más al respecto o incluso por consumirlo. Se dice que es como el THC legal, lo que suena tentador: no me meto en problemas y además me coloca… ¿qué podría salir mal?

Pues ¿la verdad? No se sabe mucho de esta sustancia, para bien y para mal. También hay que aclarar que no es una sustancia legalizada, al menos en España en este momento, sino que es alegal, por lo que no está fiscalizada, aun se encuentra en un vacío legal.

En países como Francia, Bélgica, Italia, Dinamarca, Austria, Suecia, Finlandia, Estonia y Reino Unido ya la han prohibido o previsiblemente lo harán pronto, basándose en algunos casos en los pocos estudios que existen donde se menciona el riesgo de abuso y dependencia equivalente al del cannabis.

La información más actualizada sobre el HHC viene de 2023 y, teniendo en cuenta que es una sustancia que empieza a detectarse en el mercado sobre el 2021 y  se introdujo en el Sistema de Alerta Temprana en 2022, no existen estudios suficientes y relevantes que confirmen sus efectos en humanos. Es decir, no hay evidencias científicas de los efectos secundarios negativos que puede producir el HHC, pero tampoco de los beneficios que nos puede aportar a los humanos.

¿Y lo poco que conocemos?

Sabemos que es un cannabinoide que se sintetizó por primera vez en un laboratorio en 1940, pero se dejó aparcada su investigación y uso durante muchos años. También lo encontramos de forma natural en la planta, pero la cantidad es insuficiente para poder extraerlo. Se sintetiza a partir del CBD (cannabidiol), que es el principio activo del cannabis que no altera nuestras capacidades cognitivas e, incluso, es capaz de contrarrestar los efectos psicoactivos del THC (tetrahidrocannabinol), el responsable del “colocón” de la marihuana y por tanto, componente ilegal en la actualidad en España.

Tiene una estructura molecular muy similar a la del THC, por lo que, de forma teórica, se considera que tendría los mismos efectos que éste, aunque en diferente intensidad y duración.

Efectos del THC que también se atribuyen, teóricamente, al HHC

  • Euforia.

  • Relajación.

  • Alteraciones cognitivas: Afectación de la percepción del tiempo y el espacio, la memoria y la capacidad de concentración.

  • Cambios en la percepción sensorial como colores mas vibrantes o mayor sensibilidad a estímulos visuales o auditivos.

  • Aumento del apetito.

  • Falta de coordinación motora.

  • Sequedad bucal.

  • Ojos rojos y de aspecto vidrioso.

  • Alivio del dolor.

  • Reducción de nauseas.

  • Ansiedad.

  • Paranoia.

Formas de consumo

  • Vapers de HHC ya preparados para su uso, en literatura encontramos que 600 caladas de HHC de un vaper equivaldría a unos 20 porros.

  • Cigarrillos electrónicos a través de cartuchos líquidos.

  • Aceite de HHC, para su dosificación en gotas.

  • Adición a través de spray sobre resinas y flores de cáñamo para potenciar sus efectos psicoactivos.

  • Productos comestibles, sobre todo en forma de dulces: gominolas, brownies, galletas…, y suplementos.

Aunque se pueden encontrar empaquetados de diferentes formas muy atractivas, al no haber una regulación sobre estos productos, se han encontrado que muchos de éstos pueden estar adulterados con THC, así como que no haya un control sobre las dosis o concentración reales mínimas y máximas que hay de HHC en cada uno de esos productos, por lo que los efectos que puede experimentar una persona no tienen por qué ser los mismos que los que experimenta otra, al menos no en intensidad y duración.

Además, la forma de consumo también influye en el nivel de toxicidad, siendo la inhalación y la ingesta la manera mas tóxica.

Algunos de los productos que se usan como HHC, huelen y se ven igual que los que contienen THC, lo que puede causar problemas con la ley en un primer momento, hasta que lo analizan en laboratorio.

¿Realmente el HHC es una opción válida para dejar el THC?

Reiterando que no hay estudios al respecto que hoy en día avalen ningún beneficio del HHC, desde nuestra experiencia con este tipo de sustancias diríamos que depende del objetivo del consumidor:

  1. Si lo que quieres es retirar la sustancia como tal de tu organismo, desde luego es una forma de disminuir esta presencia a priori, siempre y cuando lo que uses sean productos con nada de THC, aspecto que, al no haber una regulación, nada te asegura que sea así 100%.

  2. Si lo que quieres es no depender de ninguna sustancia y eliminar el hábito de consumo de porros, tabaco o cualquier otro tipo de sustancia adictiva, no parece la mejor opción por estos motivos:

    • Estímulos sensoriales: Aunque molecularmente no sea exactamente la misma estructura que el THC, al menos visualmente y olfativamente muchos de los productos se asemejan a lo que nos da el THC. Tu cerebro, a simple vista, no sabe distinguir si lo que tiene delante tiene o no una sustancia interna, por lo que ya se está predisponiendo para asumir estos efectos. La asociación y activación cerebral se mantiene despierta.

    • Efectos psicoactivos: Teóricamente se le atribuyen efectos muy similares al del THC, por lo que, aunque sea en menor proporción, seguimos encontrando esos efectos que, al tenerlos, relajan y producen bienestar solo por el hecho de experimentarlo. El usuario no termina de soltar la búsqueda de sensaciones, en cualquier momento puede volver a aumentar este consumo y volver al THC, ya que nunca dijimos adiós del todo.

    • Inmediatez: Sea mas o menos duradero, el uso de esta sustancia provoca un efecto casi inmediato y fácil, como el del THC. ¿Por qué esforzarse en gestionar emociones si puedo estar simplemente anestesiado? Es la gran trampa de la drogas.

    • Hábito: Nuestros patrones de comportamiento se definen y asientan con el tiempo, con la repetición, hasta que salen naturales. Ese patrón puede despertar o repetirse por cualquier tipo de disparador (lugares, personas, actividades, música, emociones, pensamientos…). Si quito la sustancia, pero mi gesto sigue siendo el mismo, no estoy aprendiendo a gestionar todo esto de una manera diferente, no me estoy dando la oportunidad de conocer o reconocer otros aspectos de la vida mas saludables y que también me puedan aportar aquello que buscamos en el THC o cualquier otra sustancia. Estamos cambiando una sustancia por otra, pero no rompiendo el hábito.

En definitiva, aunque el HHC se vende como una alternativa mas suave que el THC, la falta de seguridad, calidad y composición, así como los efectos psicológicos y psicoactivos, lo convierten en una opción poco recomendable.

Que tu amigo te diga que a él le sienta muy bien no es una garantía de que a ti también, ya que cómo lo experimenta cada uno es resultado de predisposición genética, estado de ánimo, método de consumo y composición y concentración del producto, entre otros aspectos.

Podemos ayudarte

Si quieres abandonar el uso de sustancias y crees que necesitas ayuda para ello o simplemente quieres ayuda para hacértelo más fácil, no dudes en ponerte en contacto con nosotros.

El objetivo no es solo dejar de consumir, sino abordar todo aquello que nos lleva y nos mantiene en ese consumo. Dejar de consumir es solo la punta del iceberg.

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