Adicción en el extranjero

Desde la crisis de 2009 en adelante muchos jóvenes españoles han tomado la decisión de salir del país buscando un futuro mejor. Sueldos acordes a sus estudios, posibilidad de adquirir una casa en propiedad, facilidad para encontrar empleo… en definitiva, buscando todo aquello que se ha convertido casi en un imposible en nuestro país.

A estas personas se les conoce como expatriados, pero ¿Qué consecuencias puede tener la migración para la salud mental? Y sobre todo ¿Es más fácil caer en adicciones?

A estas y otras preguntas intentaremos responder a lo largo de este artículo.

¿Cómo se siente una persona que emigra?

Todos aquellos lectores que hayan salido de su país quizás se sientan identificados

Una persona que emigra de pronto se ve en un mundo que le es completamente ajeno. Un idioma diferente, unos procesos burocráticos desconocidos, unas costumbres sociales ajenas y, a todo esto, hay que sumarle la lejanía con los amigos, familiares y demás seres queridos.

Coloquialmente, hay un término que aglutina todos los síntomas que tiene una persona que emigra: el síndrome de Ulises.

El principal síntoma es el duelo migratorio. Este se produce por la lejanía con el país de origen, que al igual que ocurre cuando fallece un ser querido, tenemos que ir poco a poco dejando atrás. Se echa de menos a los familiares, a los amigos, a la cultura propia, muchas veces al estatus social que se poseía en el país de origen, ¡e incluso a la gastronomía! Porque sí, la comida es una forma de sentirnos en casa.

Este duelo puede conducir a depresiones de mayor o menor gravedad, a crisis ansiosas e incluso podemos llegar a tener síntomas físicos, como dolor de cabeza, fatiga o insomnio.

El problema que nos atañe aquí es cuando, para huir de todos estos problemas, la persona en cuestión se lanza al consumo de sustancias nocivas buscando una vía de escape rápida.

En este punto uno debe ser capaz de ver más allá del placer momentáneo que le proporciona el consumo y hacerse la siguiente pregunta:

¿Es esta la vida que quiero iniciar en mi nuevo país?

Si estás pasando por este problema, tienes que ser consciente que si empezar una nueva vida en un país ajeno es difícil, caer en el consumo de alcohol u otras drogas hará que tu adaptación a la nueva sociedad en la que quieres integrarte sea aún más dura.

El consumo de alcohol, sobre todo si es excesivo, está muy mal visto en muchas sociedades

Con el consumo te estarás vinculando no solamente a la adicción sino que, si estas consumiendo drogas ilegales, a las organizaciones de tráfico de drogas que controlan el negocio en tu nuevo país, cada vez que vayas a adquirir estas sustancias te estarás relacionando con estas organizaciones, con los problemas que ello te puede acarrear (deudas, problemas con la policía…) por otro lado, es fácil acabar en una situación problemática con las autoridades por el propio desconocimiento de las leyes del país que tiene una persona migrante. Hace un año aproximadamente, salto a la luz el caso de un expatriado condenado en Dubái por consumo de drogas en su domicilio.

Por otro lado, en España y en general en los países del sur de Europa, el consumo de alcohol está aceptado socialmente, cosa que no ocurre en muchos de los países del norte de Europa. No querrás ser identificado como el empleado que bebe compulsivamente y acaba borracho en la primera cena de la empresa, ¿verdad?

Cambiar de país implica una avalancha emocional que no es para todos, y no tiene por que serlo. Posiblemente lidiemos con continuas cuestiones como:

  • ¿De verdad quiero vivir en este nuevo país?

  • ¿Me verán como un fracasado si vuelvo a mi ciudad?

  • ¿Por qué la gente es “tan cerrada” en este lugar?

  • Me encuentro mal pero… ¿Cómo puedo hablar de mis emociones con alguien si me cuesta hasta pedir un café en este idioma?

En definitiva, el consumo de drogas es perjudicial física, mental y socialmente hablando, y ve multiplicados sus riesgos exponencialmente cuando la situación de dependencia y consumo se da fuera de las fronteras, en una situación de desamparo y en un contexto social diferente. Se puede decir que las reglas de juego cambian y nos volvemos más vulnerables.

Si te sientes identificado con lo que tratamos en este artículo no dudes en contactar con nosotros, desde Ahora Psicoterapia te podemos ayudar. Trabajamos de manera 100% online para asegurarnos de que puedas recibir la ayuda de un profesional en cualquier lugar del mundo y con la comodidad de hacerlo en tu idioma natal, donde podrás expresarte tal y como eres.

¿Tienes alguna duda?

Si crees que alguien cercano a ti puede haber desarrollado o estar desarrollando una adicción al juego, estamos encantados/as de ayudarte y responder a cualquier duda que te haya surgido con respecto a este tema. Ponte en contacto con nosotros a través del siguiente formulario y te responderemos tan rápido como nos sea posible.

 
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